Consumo fantasma: qué es y por qué te cuesta un 10% de tu factura de luz
Pagar menos en las facturas de suministros como el agua, el gas o la luz es uno de los objetivos principales de muchas familias. De todos, quizá en la luz es en lo que más se puede tratar de ahorrar unos euros a final de mes debido al mal uso de la electricidad que se hace en casa.
Mucha gente trabaja día a día por aprovechar la luz natural, usar bombillas LED ecológicas y otra serie de pautas para ahorrar en la luz. Y, sin embargo, apenas piensa en el consumo fantasma.
El consumo fantasma o stand-by es algo a lo que apenas se presta atención y que verdaderamente supone un alto porcentaje del total de las facturas mensuales de la luz. Por tanto, cualquier persona que se plantee seriamente reducir lo que paga de luz tiene que saber perfectamente qué es esto del consumo fantasma y qué hacer para reducirlo.
Y es que el stand-by, lejos de reducirse, se está haciendo más presente en los últimos meses en cientos de miles de hogares debido al aumento del teletrabajo: ahora pasamos más tiempo en casa y, por tanto, es más fácil caer en estos errores.
¿Pero qué es exactamente el consumo fantasma? ¿Por qué el stand-by afecta a mis facturas? Estas son las preguntas que las personas concienciadas con la reducción del gasto energético se hacen a diario.
Qué es el consumo fantasma o stand-by
Llevamos cuidado con apagar las luces, no dejar el frigorífico abierto, abusar lo mínimo del horno eléctrico… Todas estas son muy buenas pautas para ahorrar electricidad, pero hay algo que siempre se olvida: los aparatos eléctricos conectados a la red realizan un gasto mínimo y continuado que puede suponer hasta el 10% de la factura mensual.
Ese piloto rojo de la televisión, el cable de cargar el teléfono permanentemente conectado, la radio que nunca se apaga de la luz porque se enciende cada día… Si piensas en todos los aparatos que hay continuamente conectados a tu casa, es muy posible que te des cuenta de que son más de los que pensabas. Y están consumiendo un mínimo de corriente, pero de manera continua.
Esto es lo que se conoce como stand-by. Se trata de electrodomésticos o aparatos que no están funcionando, pero sí enchufados por cable a la luz, de manera que hay un pequeño flujo de electricidad que reciben de manera permanente y, lo peor de todo: para nada.
Porque si un aparato está en stand-by significa que no está realizando ninguna función para las que ha sido construido, de manera que el gasto de energía está siendo completamente desperdiciado.
El consumo fantasma es sin duda uno de los gastos de electricidad más inútiles que se pueden realizar. Es algo similar a tener el aire acondicionado encendido y las ventanas abiertas. ¿Algo ilógico, verdad? Por eso hay que cuidar que los aparatos en stand-by o que realizan consumo fantasma sean los mínimos y reducir así ese porcentaje habitual del 10 % de la factura a algo menor o casi anecdótico.
Las mejores ideas para ahorrar luz durante el teletrabajo
Desde que las oficinas se han instalado en el escritorio de casa, mucha gente se pregunta con más frecuencia cómo ahorrar luz, ya que el pago de las facturas han pasado de asumirlas las empresas y son los propios trabajadores los que pagan por mantener encendido el PC, la lámpara, etc.
Usa luz natural
Si te permiten adaptar tus horarios, lo ideal es aprovechar todo lo posible la luz natural. Comprobar a qué hora amanece y a qué hora se pone el sol es el primer paso para comenzar a ahorrar. Trabajando a esas horas no será necesario el uso de flexos o luces artificiales y una bombilla menos es un gasto menos.
Unifica aparatos
¿Eres de los que trabaja con la radio encendida? Pues en vez de usar una pequeña minicadena u otro aparato, utiliza la gran oferta de podcast de Internet y escucha lo que quieras desde el ordenador. Así, el mismo aparato servirá para cumplir con dos demandas y eso se traduce en un aparato menos funcionando y gastando luz.
Revisa tu tarifa
Hay personas que usan tarifas de discriminación horaria en las que la luz es más barata por la noche, momento del día en el que aprovechan para hacer lavadoras, etc. Sin embargo, al teletrabajar, los hábitos de consumo y gasto eléctrico cambian sin duda.
Revisar la tarifa y cambiarla si es necesario será muy importante para marcar la diferencia entre el gasto previo al teletrabajo y el gasto posterior al teletrabajo. Esto es algo que se suele olvidar porque mucha gente ni siquiera conoce el tipo de factura de la luz que tiene.
Todo en regletas
Conectar todo el equipo de trabajo en regletas ayudará a que todo se pueda apagar con un solo botón ayudará a eliminar el temido consumo fantasma con el stand-by de los aparatos.
Y por supuesto, usar esta regleta. De lo contrario, el botón amarillo de la propia regleta seguirá encendido y los aparatos conectados a ella harán un consumo fantasma continuo que podrá suponer ese ya indicado 10 % de la factura.
Calefacción
El aire acondicionado o la calefacción son los aparatos más temidos para las personas que teletrabajan. ¿Cómo evitar que supongan un gasto inasumible? Es bien sencillo: realizando un uso responsable de ellos. Para esto, es imprescindible no poner temperaturas muy elevadas o muy bajas y no tenerlo a pleno rendimiento 24 horas. Cerrar puertas y ventanas, y abrigarse en invierno o hidratarse en verano es la mejor solución para no tener que estar tirando demasiado de estos aparatos.
Todos estos consejos son imprescindibles para reducir el consumo fantasma y además ahorrar en la factura de la luz cuando se teletrabaja. Simplemente se trata de adquirir unos buenos hábitos e integrarlos en el día a día de un modo natural y sin grandes sacrificios. Siguiendo estos pasos se puede evitar pagar de más cada mes y ahorrar entre un 10 y un 25 % en la factura de la luz.